Latinoamerica - Activista gay lucha por prohibir enseñanza de religión

En Costa Rica, un activista gay interpuso este martes una acción de inconstitucional contra la enseñanza de religión católica en el sistema educativo público.  

Yahin Castrillo considera que esta materia atenta contra la libertad de culto y los derechos humanos de la población no católica.

“Lo que se impugna es la disposición que aparece en el manual descriptivo de especialidades docentes, que regula lo que tiene que ver con la educación religiosa. Ahí se establece como objetivo principal de esa materia que los alumnos asimilen y hagan propio el sistema de creencias de la religión católica, apostólica y romana”, dijo Castrillo a La Prensa Libre.

“En mi opinión, esta norma viola los derechos de dignidad de la persona humana, el libre desarrollo de la persona humana, igualdad, pluralidad, paz, justicia, en el tanto impone a los estudiantes, desde el nivel preescolar a la educación superior, un credo religioso y una cultura que no necesariamente son los de los estudiantes”, agregó.

Castrillo espera que con esta acción la Sala Constitucional declare a la educación pública, en todos sus niveles, como laica y ecuménica, logran eliminar todo rastro de religión en las aulas costarricenses.

Por su parte, el diputado evangélico Fabricio Alvarado, lamenta esta solicitud.

"Hoy en día hay personas que con el afán de imponer sus estilos de vida quieren sacar a Dios de todo, en especial de los espacios sociales donde se forma el ser costarricense, como es la educación, algo que es peligroso para las nuevas generaciones", escribió.

"Esas personas pierden de vista el valor fundamental de Dios, y eso implica que lo quieren eliminar a toda costa, trayendo como consecuencia violencia, libertinaje y la pérdida de valores y principios que han marcado este país", añadió.

Para Alvarado esta iniciativa podría perjudicar al país.

"Estas ideas no le hacen bien al país, por el contrario, dejan en un plano de indeterminación la diferencia entre lo bueno y lo malo, algo que marca negativamente a la sociedad", dijo.

"Quienes las promueven, y nos han acusado de intolerantes, ponen en evidencia con estos actos, que son ellos los que padecen de altos niveles de intolerancia religiosa", agregó.

Actualmente, todo aquel estudiante que practique otro credo y no desee recibir la lección de religión católica, pueden ausentarse de la clase. Para el abogado, esto constituye un acto discriminatorio para los alumnos.

Fuente: CBN Latino